Deberíamos empezar por tener periodistas de verdad, que se nieguen a retransmitir ruedas de prensa dadas por un plasma. O que convocan huelgas enfrente de la sede de TVE por el control gubernamental.
Pero eso no lo veremos en España, porque no tenemos periodistas, tenemos difusores de propaganda.
Pero eso no lo veremos en España, porque no tenemos periodistas, tenemos difusores de propaganda.