En abril de 2020, el mayor fondo benéfico del país, Fidelity Charitable, anunció un plan para ayudar a mitigar la crisis. Declaró que crearía una iniciativa de un mínimo de 1000000$ dirigida por fideicomisarios para apoyar los esfuerzos de respuesta al Covid y proporcionar a los donantes orientación y recursos que les permitan dirigir mejor su dinero en la pandemia. Sin embargo, ha canalizado millones de dólares a través de su programa de fondos asesorados por donantes a grupos que promueven la desinformación y el escepticismo sobre las vacunas
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En abril de 2020, cuando la primera oleada de la mortal pandemia de coronavirus se abría paso en Estados Unidos, el mayor fondo benéfico del país, Fidelity Charitable, anunció un plan para ayudar a mitigar la crisis.
"Como mayor donante del país, Fidelity Charitable se compromete a apoyar al sector sin ánimo de lucro y a las comunidades afectadas por la pandemia Covid-19, así como a permitir a nuestros casi un cuarto de millón de donantes responder eficazmente a las numerosas necesidades que surgen a diario", declaró el fondo, que distribuyó 11.200 millones de dólares en subvenciones el año pasado y está afiliado a Fidelity Investments.
Con este fin, Fidelity Charitable dijo que establecería una iniciativa de un mínimo de un millón de dólares dirigida por el fideicomisario para apoyar los esfuerzos de respuesta a Covid y proporcionar a los donantes orientación y recursos que les permitan dirigir mejor su dinero en medio de la peor pandemia en un siglo.
"Estamos centrados en ayudar a nuestros donantes y al público en general a identificar las formas más impactantes en que pueden donar, utilizar su talento y hacer oír su voz para ayudar a otros afectados por esta crisis", rezaba el comunicado de prensa.
Sin embargo, a pesar de las elevadas promesas, los registros fiscales revelan que Fidelity Charitable ha canalizado millones de dólares a través de su programa de fondos asesorados por donantes a grupos que promueven la desinformación y el escepticismo sobre las vacunas. Una gran parte de las donaciones que identificamos se produjeron entre julio de 2021 y junio de 2022, después de que la primera vacuna Covid estuviera disponible para el público y mientras la pandemia continuaba.
Por ejemplo, en su ejercicio fiscal 2021-22, donó aproximadamente un millón de dólares a Children's Health Defense, una organización sin ánimo de lucro fundada por Robert Kennedy Jr. que siembra dudas sobre la seguridad de las vacunas, y a dos de sus secciones estatales. Kennedy, que durante mucho tiempo promovió la idea desacreditada de que las vacunas pueden causar autismo, ha llamado a las inyecciones de Covid un "arma biológica étnica" y "un crimen contra la humanidad." En un reciente post en X, la plataforma antes conocida como Twitter, Children's Health Defense afirmó que las inyecciones de ARNm "contaminan" la leche materna. (Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan… » ver todo el comentario
www.meneame.net/story/robert-f-kennedy-jr-avivo-anos-desconfianza-haci
Brownstone también nombró becario al Dr. Paul Alexander, exasesor científico del Departamento de Salud y Servicios Humanos de la administración Trump, pero lo eliminó de su sitio web tras un reportaje de Important Context que destacaba una publicación en su Substack en la que pedía juicios públicos y ahorcamientos de funcionarios de salud pública. Fidelity Charitable también donó casi 91.000 dólares a la Asociación Epoch Times, que publica el periódico Epoch Times, respaldado por Falun Gong y que promueve la conspiración. El periódico ha publicado varios artículos con información errónea sobre las vacunas, incluido un informe falso en el que se afirmaba que habían matado a 17 millones de personas.
Fidelity Charitable no respondió a la solicitud de comentarios.
Su capacidad única
Otra importante organización benéfica que alimenta el sentimiento contrario a la salud pública en Estados Unidos es el Vanguard Charitable Endowment Program, afiliado al titán de la gestión de inversiones Vanguard Group. En diciembre de 2020, la organización anunció que su base de donantes había donado casi 1.300 millones de dólares a "organizaciones sin ánimo de lucro que participan directamente en los esfuerzos de socorro relacionados con el Covid-19, así como a una serie de otras organizaciones 501(c)(3), muchas de las cuales se enfrentaron a reveses financieros desde el estallido de la pandemia".
Pero al igual que Fidelity Charitable, Vanguard Charitable distribuyó una cantidad significativa de dinero a grupos que trabajan contra los esfuerzos de vacunación. Entre sus años fiscales 2020 y 2022, que van de julio de 2019 a junio de 2022, dio 2,8 millones de dólares a organizaciones que impulsan la desinformación y el escepticismo sobre las vacunas. La mayor parte de ese dinero llegó durante su año fiscal 2022.
Vanguard Charitable donó la asombrosa cantidad de 1.474.000 dólares a Children's Health Defense y su sección de California. Otros 600.000 dólares fueron a Informed Consent Action Network. También donó 50.000 dólares a Citizens' Council for Health Freedom, que difundió un memorando en 2019 instando a la gente a "pensárselo dos veces antes de vacunarse contra… » ver todo el comentario
"No hay soluciones sencillas"
Con una importante financiación detrás de sus operaciones, los grupos que fomentan el escepticismo sobre las vacunas han contribuido a politizar las inyecciones que salvan vidas y la pandemia en su conjunto. Con la politización ha llegado la radicalización.
Científicos como Peter Hotez, M.D., Ph.D., renombrado virólogo del Baylor College of Medicine que codesarrolló una vacuna Covid sin patente para su uso en países pobres, han expresado su profunda preocupación por la creciente animadversión hacia la salud pública y los científicos.
"Como informo en mi nuevo libro The Deadly Rise of Anti-Science, el movimiento antivacunas se ha transformado en una empresa peligrosa y políticamente cargada", afirma Hotez. "Durante la pandemia, provocó la muerte innecesaria de 200.000 estadounidenses, entre ellos 40.000 sólo en mi estado de Texas. Por eso debemos preocuparnos por esto. Si queremos salvar vidas, debemos encontrar la forma de desvincular o desligar el activismo antivacunas y la anticiencia de la política en Estados Unidos."
Hotez ha sentido de primera mano el impacto de esta politización. Ha sido blanco frecuente de los antivacunas y de la derecha política. En junio, el científico se enfrentó a días de acoso tras denunciar en el podcast de Joe Rogan la desinformación de Robert Kennedy Jr. Rogan respondió invitando al científico a debatir en su programa con el aspirante presidencial antivacunas, y Elon Musk apoyó la idea. Además de la avalancha en Internet, dos personas se presentaron en la casa de Hotez en Houston.
"La mayoría de los días estoy bien, pero cuando los ataques se aceleran después de que, por ejemplo, Fox News se dirija a mí en un programa nocturno o este último con Elon-Rogan-Kennedy, la pila se vuelve muy oscura y aterradora", dice Hotez.
Cortar la espita de la financiación podría ayudar a rebajar parte de la tensión, pero hacerlo no es tarea fácil. Aunque los patrocinadores de los DAF tienen pleno control legal sobre los fondos que distribuyen, conseguir que dejen de financiar organizaciones antivacunas y contrarias a la salud pública puede resultar difícil.
Es un problema, dice Colinvaux, para el que "no hay soluciones sencillas".