Un vecino de Lleida llamó al 112 porque creía que estaban robando en su piso y, ante la demora de los servicios de emergencias, se le ocurrió salir al balcón y gritar que había matado a su pareja. Acabó siendo denunciado por movilizar por una falsa emergencia a cuatro patrullas de la Guàrdia Urbana, dos dotaciones de los Mossos d’Esquadra y dos ambulancias del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM). Los agentes comprobaron que no había ningún indicio de robo y que todo era falso. Se enfrenta a una sanción de entre 601 y 30.000 euros.
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Tras la multa llamará a una buambulancia
Pues a la sanción a la que se enfrenta igual le venía a cuenta ser robado...la broma le va a salir cara.
Harto de llamar a la policía por las constantes fiestas a las tantas de la madrugada cualquier día de la semana y que no le hicieran caso, un día cambió de táctica. Llamó a la poli y dijo que estaba preocupado porque en el piso de al lado se oían golpes y gritos de chicas (lo cual era verdad). No tardaron ni 10 minutos en aparecer por allí media docena de patrullas.
Un poco mas y va el ejercito