Pero sobre todo una economía que ponga en valor los cuidados; una economía «cenicienta» que priorice el cuidado de todas las formas de vida, desde principios colaborativos, frente a la lógica agresiva, competitiva y depredadora de recursos que impone el mercado. Una economía, en suma, con alma de mujer.
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Mujer como Ayuso, como la Tatcher, como cristina kirchner?
Pues no veo yo mucha diferencia entre la economía de estas mujeres y la actual.
Otro artículo panfletero para imponer ideología de genero.