Fue concebida en Portugal, es gratuita, ha sido adoptada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ya está siendo utilizada por varios países. La Asociación Portuguesa de Administradores de Hospitales (APAH) ha elaborado, junto con una empresa de productos tecnológicos (Glintt) y con la colaboración de la OMS, un instrumento gráfico que permite a los encargados de formular políticas y a los especialistas en planificación de la atención de la salud leer cuántos recursos humanos y materiales tiene un país y cuántos necesita contratar
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¿Cuántas camas necesitaremos para los pacientes de las unidades de cuidados intensivos o de las salas? ¿Cuántos médicos y qué especialidades necesitaremos? ¿Cuántos respiradores serán indispensables para los pacientes en estado crítico? Este es el tipo de pregunta que la Herramienta de Apoyo a la Planificación de Sobretensiones Adaptt nos permite responder, explica Alexandre Lourenço, presidente de la APAH . "No es nada complicado. Es una hoja de Excel con un modelo epidemiológico que nos permite comprender el impacto de las medidas de mitigación en la necesidad de recursos", ilustra el consultor de la OMS.
Presentado por la OMS este miércoles y ya traducido al portugués, inglés, español, ruso y árabe, se trata de un instrumento flexible que permite a los usuarios introducir los datos epidemiológicos de su país, las capacidades de los distintos tipos de camas y los recursos humanos (utilizando los códigos de la Organización Internacional del Trabajo), variar los escenarios de mitigación y adaptar la respuesta a las distintas tasas de ataque.
En la práctica, el instrumento adoptado ahora por la OMS impide simultáneamente que un sistema de salud se derrumbe por falta de recursos o por el desperdicio de demasiados recursos canalizados para combatir la pandemia en cada etapa. "Incluso puede servir para convencer a un gobierno de la importancia de aplicar medidas", cree Alexandre Lourenço. Y todavía está perfectamente a tiempo, porque aunque la primera ola de la epidemia ya se está superando en algunos países, el esfuerzo tiene que continuar, entre otras cosas porque puede que tengamos que enfrentarnos a "la segunda y tercera ola". "No debemos descuidar el futuro", subraya.
Se ha publicado gratuitamente, ya está siendo utilizado por varios países de Europa, África y Asia y se puso a disposición del Ministerio de Salud de Portugal el 30 de marzo.