Hay que tener una colosal bajeza moral y un enorme déficit educativo para juzgar a una persona por su aspecto y hay que ser todavía más inconsciente y más estúpido para compartir dicho juicio con la ciudadanía, con el daño que ello ocasiona a la tolerancia. Pero todavía se puede llegar a cotas mayores de indigencia moral y ello es posible introduciéndote en las listas de un partido político, el PP en este caso, o no exigiéndote de inmediato la dimisión.
|
etiquetas: celia villalobos , piojos , rastas , pp
"A mí que un diputado de Podemos -o aunque fuera del Partido Popular- lleve rastas... Yo tengo sobrinos y familiares, chavales que tienen rastas. A mí con que las lleven limpias, para no pegarme los piojos, me parece perfecto"
No obstante, me sigue pareciendo desafortunado. ¿O es que la mención a los piojos no es intencionada?