Paco tiene 23 años, vive en Murcia y el pasado 6 de diciembre tuvo un fuerte accidente mientras trabajaba en Domino’s Pizza como repartidor. Llegó al hospital inconsciente, una brecha de siete centímetros en la mandíbula, un edema pulmonar, un traumatismo craneoencefálico y varias contusiones. Paco tenía un contrato temporal el 10 de septiembre del 2019 al 9 de enero del 2020 y la empresa, tras el accidente, no han renovado al trabajador.
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La regla general es que el trabajador no puede salir de su puesto más pobre de lo que ha entrado. Si le ponen una multa yendo a trabajar, la paga él. Si le ponen una multa en el trabajo, la paga el empresario. Por supuesto, eso que hacen algunos de obligar a sus trabajadores a pagar los desperfectos que generan (o las pérdidas por robo, etc) es completamente ilegal. Puedes despedirle o suspenderle de empleo y sueldo, pero la multa se la pagas.
A ver si alguien nos puede sacar de dudas.
No le han echado estando de baja, tenía un trabajo que duraba hasta el día X, y cuando ha llegado ese día, se acaba el contrato y punto. La empresa no tiene porqué renovarle por estar de baja, no?
¿la empresa debe hacerse cargo de tus desviaciones respecto a la ley?
Si te saltas un semáforo, te lo paga la empresa?
Si te da por pegarle a alguien lo paga la empresa?
Si tiras la basura en medio de la calle, lo paga la empresa?
No parece tener mucho sentido. Creo que es cada uno quien se responsabiliza de sus actos. La empresa hará sus triquiñuelas, pero raro sera que se mojen. Diría que lo más inteligente es no mojarse uno tampoco.
A mi me han presionado y no me he dejado, pero claro, eso tiene sus consecuencias. Primero que llega otro y lo hace, por lo que se lleva el favor, pero también el riesgo. Y tu quedas mal o algo más, pero no corres el riesgo. Cada uno actúa como cree oportuno.
Creo que este chico corro el riesgo y tiene sus consecuencias (creo, porque puede ser un accidente fortuito). Sinceramente, para como van estos chicos, pocos casos se ven. Supongo que no es porque no se den sino porque no salen a la luz.
Una pena lo de este chico porque pueden salir muy mal parados. La moto es un rifle cargado y sin seguro.
Insisto, no soy un experto, pero tampoco me creo mal asesorado. Eso sí, como alguien me ponga una referencia oficial (o medianamente fiable) que demuestre que tenéis razón, me voy a reír.
Una hipoteca y las facturas de varios churumbeles hacen maravillas con el sentido común.
Para ser honestos, en su momento se pagó y punto. Esta hipótesis la estoy haciendo ahora que me decís que las multas las paga el trabajador.
Desde luego, si no son delitos (que la mayoría de las multas no son delitos), yo siempre he tenido entendido que eran cosa de la empresa. A ver si alguien se enrolla y pone algún enlace oficial que lo aclare.
www.ajimenezabogados.es/2017/04/11/que-ocurre-si-un-trabajador-comete-
No es un enlace oficial pero supongo que te valdrá.
PD: La verdad, estoy aprendiendo un montón con este dichoso hilo. Con lo poco que conozco el derecho laboral, jamás hubiera dicho que el tema de las multas de tráfico funcionara así. Por lo general, los platos rotos los paga siempre el empresario, y ya si acaso el trabajador se come la sanción disciplinaria que le ponga la empresa.
Que yo sepa nunca se ha negado nadie a conducir, pero es uno de los requisitos del puesto de trabajo, supongo que si alguno se niega tajantemente la cosa acabaría en despido y juicio.
Por cierto, si te han presionado y no te has dejado, quiere decir que no estaban en posición de presionarte. Pero hay mucha gente por ahí que no puede permitirse el lujo de arriesgar el sustento de su familia. Y si el dueño de Magrudis te dice que el horno está limpio, tú no puedes pararlo todo y decirle que tú lo ves sucio y que ahí no entra ni un gramo de carne. Es más, me parecería profundamente inmoral que el trabajador sacrificase a su familia para salvar su integridad moral. Todos los niños tienen derecho a un papá que lo daría todo por ellos, menos esos pobres desgraciados, cuyo padre se dedica a pagarse sus caprichos éticos con el hambre de sus hijos.
Al final, el problema siempre se origina en la tasa de paro que tenemos. El trabajador no puede plantarse porque arriesga demasiado, y eso obliga a poner una legislación rígida y burocratizada que reduzca los abusos. Irónicamente, es precisamente esa legislación la que mantiene un paro artificialmente alto. La pescadilla que se muerde la cola.
Debe haber salida para situaciones de este tipo. Y no hay mejor salida que un nuevo trabajo.
Hasta que no se desregule el mercado laboral no vamos a salir de estos niveles de paro, aunque se tenga que pagar un precio durante la implantación de nuevas medidas. Y con estos niveles de paro casi estas obligado a tragar, cuando lo ideal seria que fuera el empleador quien tuviera que tragar porque contratar a otra persona lo deja fuera de juego durante semanas, y teniendo que negociar sueldos al alza por la falta de oferta de trabajadores.