Resulta paradójico que la comunidad gobernada por Díaz Ayuso sea la más beneficiada por el Ejecutivo socialista, según la contabilidad de Hacienda, porque en los últimos años no se recuerdan grandes obras en infraestructuras. Hay varias explicaciones a esta situación, la forma de registrar contablemente las inversiones en otros puntos del Estado que terminan imputadas a Madrid o las dinámicas de inversión de las grandes empresas públicas, como Renfe, Adif, o Aena, entre otras.