El líder norcoreano, Kim Jong-Un, ordenó un ejercicio de simulación a gran escala de ataque contra Corea del Sur tras la imposición de nuevas sanciones por la ONU, a las que se sumaron este viernes medidas unilaterales de Seúl y Tokio. Los ejercicios militares norcoreanos tomaron como blanco hipotético a cinco islas y a "órganos dirigentes reaccionarios" en Seúl y otras ciudades. "Si estalla una guerra, un golpe mortal como éste será asestado a las fuerzas surcoreanas, para quebrar por completo y cortar de raíz su voluntad de respuesta