Sólo UpyD parecía mostrar un cierto interés en la oferta, lo cual no deja de tener sentido, por dos motivos: el partido magenta es totalmente irrelevante en Catalunya, y Rosa Díez acaba de iniciar una cierta maniobra de aproximación al PP para intentar frenar la presión, externa e interna, que en Madrid aboga por un pacto o fusión de UPyD con Ciudadanos