Es un lujo enfermarse en Venezuela y mucho más ahora cuando los medicamentos y los productos de higiene personal escasean de manera crónica en el orden de 60% en Caracas y de 70% en el interior del país, lo que ha agudizado la imaginación y la inventiva de los venezolanos para enfrentar las enfermedades. Para prevenir la plaga de mosquitos portadores del dengue, chinkungunya y hasta el nuevo brote de malaria, los venezolanos se las ingenian para fabricar repelentes caseros según las recetas de la abuela.

La mayoría de los adultos mayores revelan que el dinero proveniente de su pensión de vejez, calculada en 4.800 bolívares, a duras penas les alcanza para cubrir sus gastos, entre ellos, alimentos e insumos médicos. Este dato se desprende de una encuesta que realizó el Gobierno regional en las Casas de Abuelos de Miranda.

Hacer enormes colas frente a supermercados, farmacias y tiendas, donde se venden productos de higiene u otros artículos indispensables en la vida cotidiana, se ha convertido en un elemento inevitable en la vida diaria de los venezolanos. La gente se queja de la pérdida de tiempo que significa esperar durante horas en una fila para poder adquirir los productos básicos, tales como medicamentos, harina, leche, carne, pollo, azúcar y papel higiénico, entre otros.

El cierre momentáneo de la popular heladería Coromoto, que está en el Guinness por su variedad de sabores, refleja los problemas que se viven en Venezuela para obtener algunos alimentos básicos.

Solo un poco más de un millón de bebés nacieron el año pasado en Japón, según las nuevas cifras del gobierno. Esta es la cifra más baja que se ha registrado y la señal más reciente de que se ha avanzado muy poco en cuanto a la lucha del país contra las tendencias demográficas desfavorables. El Ministerio de Salud de Japón también estimó que 1.269.000 personas murieron en 2014, lo cual indica que existe una disminución natural de la población de 268.000 personas.

Los restaurantes se han visto obligados a sustituir las 'papas fritas' por opciones locales como yuca, arepa y ensalada. La franquicia ha dicho en un comunicado que se ha visto afectada por una "situación puntual de distribución". En los últimos años las operaciones de grandes trasnacionales en sectores como el automotriz, la medicina o el alimentario se han reducido en Venezuela.

Las colas se han convertido en el día a día de los venezolanos, al igual que la desesperación por hallar los productos básicos que con dificultad se consiguen y en ocasiones a un alto costo. De tal manera quedo en evidencia en este video, que tuvo lugar en Makro de los Teques, en el momento que sacaron los paquetes de jabón en polvo, la actitud de los consumidores quedo plasmada a través de las siguientes imágenes. Enlace directo al vídeo: www.youtube.com/watch?v=L9E6yugt5Jc

Funcionarios del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería, acompañados de comisiones de la Guardia Nacional Bolivariana y de la Policía Nacional Bolivariana, estarán instalados en la entrada de abastos y supermercados de todo el país, con el propósito de preservar el orden y solicitar la cédula de identidad a los usuarios, informó la ministra de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Carmen Meléndez. La ministra dio a conocer el operativo, que ayudará a evitar la intención de comprar productos de manera fraudulenta.

El desabastecimiento alimentario obliga a Mc Donald's a retirar las patatas fritas de los menús. Colas de hasta cuatro horas para comprar leche, aceite, harina, pollo y papel higiénico.

La nueva normativa señala que se podrá comenzar a hacer fila en los establecimientos a partir de la 7:00 am. El gobernador señaló que la mayoría de las personas que hace cola altera el orden público y son revendedores

El gobierno del país caribeño no quiere reconocer que la gente hace colas de días para comprar pañales o leche. “Yo hice cola el otro día para entrar a un juego [de béisbol], hice cola para entrar al estadio, y, entrando, para ubicar mi sitio, y luego hice cola con mis hijos para comprar una arepa [torta de maíz]”. La periodista le interrumpió: “¿Es la misma cola de la señora que está afuera que lleva dos días tratando de encontrar pañales para su bebé?”. La réplica del ministro de Alimentación fue: “Estás exagerando”.

El vicepresidente de Venezuela, Jorge Arreaza, encabezó este lunes la incautación más de 1.000 toneladas de alimentos de primera necesidad en una zona industrial del municipio San Francisco, estado Zulia. Acompañado de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), el ministro para la Alimentación, Carlos Osorio, la ministra para el Comercio, Isabel Delgado, y el superitendente de Precios Justos, Andrés Eloy Méndez, mostró a los venezolanos parte de los alimentos incautados en los galpones de la empresa privada Herrera C.A.

La situación más delicada se vivió en Quíbor, donde durante la mañana se conoció la llegada de un camión cargado de pañales. Tan pronto se corrió la voz, el caos no se hizo esperar en una de las principales arterias viales, llegando incluso a paralizarse el tráfico. No faltaron los conatos de peleas aunque el propietario del negocio, tuvo paciencia para marcar números en los antebrazos de quienes hacían la cola y nunca perdió la calma a pesar de la alteración. Quedan dudas de si el comerciante volverá a vender pañales sin protección policial.

La escasez de productos básicos ha llevado a los empresarios a tomar cartas en el asunto y denuncian que sólo "hay inventarios de productos básicos para 45 días". El primero en alzar la voz ha sido Jorge Roig, el presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela. "Las informaciones que tenemos directamente es que hay inventario para 45 días máximo, esa no es ninguna buena noticia", explica. Además, indica que el creciente nerviosismo influye negativamente en los venezolanos, que se lanzan a realizar "compras nerviosas".

"Yo te recomiendo que no te metas ahí. Achántate (aguántate) que allá adentro hay bastante". Quien habla es Luis González, autor del vídeo Trifulca por jabón Makro Los Teques (06/01/2015) que para el momento en el que redacto estas líneas tiene más de 200.000 visualizaciones en YouTube.

Los estudiantes Joaquín Salas y María Flores fueron detenidos ayer en Maracaibo por repartir agua a las personas que madrugaron para comprar comida, pañales, champú y papel higiénico. Unos militares les indicaron que no estaba permitido y los estudiantes siguieron con su actividad bajo el argumento que no hay ninguna ley que prohíba este tipo de protesta pacífica. Les retuvieron además del agua unos panfletos en los que advertían de la grave situación que se padece por la escasez y fueron detenidos por la Guardia Nacional Bolivariana.

El Foro Económico Mundial anunció esta semana en su reunión anual en Davos que la crisis mundial del agua es ahora el mayor riesgo con mayor impacto en nuestras vidas y nuestro planeta. La triste realidad es que los líderes del mundo ahora ven la falta de acceso al agua potable y los fenómenos meteorológicos extremos, tales como sequías catastróficas como riesgos más grandes que cualquier otra cosa.

La ONU advierte que la escasez de agua podría llevar a conflictos entre países. El último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de las Naciones Unidas prevé un aumento en la temperatura global de entre 0,3 y 4,8 grados para finales del siglo XXI. El mundo no ha despertado realmente a la realidad a la que nos vamos a enfrentar en términos de crisis en lo que respecta al agua

En el estado de Táchira, gobernado por el chavista José Vielma Mora, además de portar el DNI, los consumidores deberán presentar la partida de nacimiento del bebe o, en su defecto, el certificado de nacimiento original; las embarazadas deberán mostrar una ecografía si todavía no se les nota la panza. En el caso de pañales para adultos u otro producto de uso clínico para mayores, se deberá presentar el certificado médico original emitido en los últimos 60 días. La medida se acordó en el marco de una serie de medidas contra el desabastecimiento.

Un paquete de 36 condones cuesta en torno a los 4.760 bolívares (unos 750 dólares) en Mercado Libre, un sitio donde los ciudadanos venezolanos pujan por los bienes que el país tiene, según Bloomberg. Un paquete de tres asciende a unos 62 dólares. Una situación que muchos aprovechan. En el mercado negro, el mismo paquete de 36 preservativos se puede adquirir por 25 dólares. El problema es que la escasez está llegando también a este reducto.

Realizar colas en Venezuela no solamente se ha convertido en una acción rutinaria, sino además en una nueva fuente de ingresos; la cotidiana actividad ha impulsado la creatividad de muchos. En los medios de comunicación locales se han dado a conocer diferentes situaciones, como el alquiler de niños como “salvoconducto ” para evitar filas. El jueves pasado se conoció que algunos padres venezolanos llevan a sus hijos a los comercios y se aprovechan de la desesperación del infante para “alquilar sus llantos”.

Ya es oficial. Venezuela ha reconocido que es el país con más inflación del mundo. Con un mes de retraso, el Banco Central ha publicado datos oficiales. En el año 2014, el encarecimiento de productos alcanzó el 68,5%. Esta inflación desbocada es consecuencia, según el Gobierno de Maduro, de la llamada ‘guerra económica’ contra las políticas chavistas. Para recrudecer el adverso escenario financiero que sufre la población venezolana, el ministro Torres anunció este mismo viernes que “muy pronto” habría noticias sobre el precio de la gasolina.

"Mi sobrina está muy enferma, no hemos sido capaces de localizar el medicamento en las farmacias o en los hospitales", dice Nelson Jaimes, quien es tío de Chacón y, casualmente, un farmacéutico. "Nosotros, los que están dentro de la empresa farmacéutica no podemos localizar los productos. ¿Qué puede un ciudadano normal esperar encontrar?"

Si uno comprende y asume que el escenario más realista que tenemos por delante es el del descenso energético, se puede a partir de ahí adoptar medidas conducentes a gestionar los recursos restantes de una manera más eficiente o socialmente más equitativa. Pero para ello es muy importante comprender que estamos embarcados ya en el proceso de descenso energético, porque de otro modo la asignación de recursos no sólo será altamente, sino socialmente muy destructiva.

Revuelo se armó este miércoles en una tienda de la cadena Makro en Venezuela,en la ciudad deSan Cristóbal, luego que se dio a conocer la supuesta llegada de cauchos a precio regulado. Cientos de personas se instalaron desde la noche anterior en el comercio con la esperanza de adquirir neumáticos para su vehículo,pero la realidad les pintó otro panorama: la gandola no había llegado.