Parece evidente que las posiciones de Iglesias-Echenique, por un lado, y de Íñigo Errejón y sus seguidores, por otro, tenderán en el tiempo a ensancharse [...] entre otras cosas, porque la posición de Iglesias es incompatible con la construcción de nuevas mayorías de carácter transversal que reclama Errejón. Y hoy, le guste o no a Iglesias, los grandes partidos europeos tienen un carácter transversal (agrupan a todas las clases sociales) que parece despreciar el líder de Podemos.