"Añadiendo la incomodidad de tener que asistir obligatoriamente a la citada asamblea del 25 de agosto, en la que, además, se produjo un hecho especialmente hiriento para este cuerpo técnico, ya que a varias de las integrantes femeninas del staff técnico se les obligó a colocarse en primera fila, exponiendo su imagen e intentando dar a entender a la sociedad y jugadoras, que compartían las tesis del presidente de la RFEF"