Dos presos fueron decapitados hoy y un número indeterminado resultó herido en una rebelión de internos de una penitenciaría de Paraná, estado del sur de Brasil, cuya dirección negociaba la liberación de tres rehenes, informaron fuentes oficiales. La rebelión es protagonizada por cerca de 800 de los 1.040 presos de la Penitenciaría Estatal de la ciudad de Cascavel, que reivindican mejores condiciones de infraestructura, alimentación e higiene, así como el fin de supuestos abusos y actos violentos por parte de la guardia carcelaria.