Las ventas de automóviles en Europa vuelven a sumar otro mes más de caídas interanuales, lo que evidencia que algo no funciona bien en la economía del Viejo Continente. Este ha sido el décimo descenso interanual de las ventas consecutivo, una corrección que se asemeja a la que sufrió el sector entre finales de 2011 y principios de 2013, con la zona euro sumida en la crisis de deuda soberana que provocó una recesión económica que duró dos años. Los paralelismos son inevitables ahora que el crecimiento en Europa se está desacelerando y el Banco C

Nuevo desplome en las ventas del comercio textil. De acuerdo con los datos del barómetro que realiza de forma mensual la patronal Acotex, las ventas cayeron el pasado mes de noviembre un 37,1% sumando tanto las tiendas físicas como el negocio online, quedando así el acumulado del año con un descenso del 40,5% con respecto a 2019. Ni los descuentos durante la campaña del Black Friday ni las ofertas continuas para atraer al consumidor han logrado así sus objetivos y los márgenes, además, se hunden cada vez más.

El licor espirituoso con el curioso primate en su etiqueta ha visto un aumento en el número de ventas que ronda el 18%, mientras que los niveles de consumo en los bares y restaurantes han visto una caída de casi el 43% en 2020, como consecuencia de los cierres y restricciones impuestas para controlar la pandemia, ha aumentado la venta minorista del mismo producto, según el Ministerio de Agricultura y Alimentación de España.

El mundo se ha sumido en una crisis tanto económica como sanitaria provocada por el coronavirus. Sin embargo, esta no ha afectado a todos por igual, y sigue existiendo un grupo de afortunados que, por A o por B, han mantenido intactas sus fuentes de ingresos, y Rolls-Royce es prueba irrefutable de ello. La firma de lujo inglesa ha batido el récord de ventas de vehículos a lo largo de esta primera mitad de año, la mejor en sus 116 años de vida, con un crecimiento de un 62% en ventas.