Los objetos de bronce que se encuentran en las excavaciones arqueológicas aparecen recubiertos habitualmente por una pátina verde formada por los carbonatos u óxidos de cobre que produce la aleación con el paso del tiempo. Hace 40 años, sin embargo, los arqueólogos que desenterraron el ejército de 8.000 soldados de terracota a tamaño natural cerca de Xi’an, en China, descubrieron que, a pesar de llevar 2.000 años bajo tierra, muchas de las armas de bronce de los guerreros estaban afiladas yconservaban el aspecto dorado.