A punto de cumplirse una semana desde que Nicolás Maduro pusiera en marcha las nuevas medidas económicas para Venezuela, el valor del bolívar, fijado en una tasa de 60 unidades por dólar tras la reconversión que le ha restado cinco ceros a la moneda local, ha seguido depreciándose en los mercados secundarios, ubicándose en algunos índices referenciales a 90, e incluso los 120 bolívares por unidad. Es decir, una devaluación cercana al 50% adicional a la del 96% que se reconoció oficialmente al lanzar la nueva moneda..