El grupo de Ignacio Aguado ha respaldado una reforma exprés del PP de la ley del suelo para sortear una sentencia judicial. Los 17 diputados de Ciudadanos han permitido a los populares sacar adelante una reforma exprés de la ley del suelo de la Comunidad de Madrid para sortear una sentencia judicial que afecta a los vecinos de Valdebebas, uno de los grandes desarrollos urbanísticos de Madrid. La modificación se ha realizado por el trámite de urgencia y en lectura única; una circunstancia que impide a la oposición presentar enmiendas al texto.

El plan de Ciudadanos es muy claro. Sencillo. Y electoralmente bueno para sus intereses: dejar que la marca 'PP de Madrid' se queme sola. Sembrar, esperar y cosechar. El objetivo es llegar a las elecciones autonómicas de la primavera de 2019 con posibilidades reales de hacerse con el poder en la Comunidad de Madrid mientras que los populares se siguen desangrando por los casos de corrupción. Si la herencia del 'aguirrismo' empezó a sepultar al PP, los 'affaire' del 'cifuentismo' pueden acabar de enterrarlo. Varios metros bajo tierra.

Al mercado no le importa que se produzca ese cambio de apoyos desde el PP a Ciudadanos. Y en el caso del PSOE y Unidos Podemos incluso le agrada. Y es que ve como algo bueno que se produzca un aumento de la influencia de los de Rivera. Ante la corrupción y los escándalos que han afectado al Partido Popular (entre ellos los de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, que han sido determinantes en la opinión de los encuestados en este barómetro), los inversores ven con buenos ojos que Cs tenga más poder.

La llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa ha desatado toda una serie de quinielas. Entre ellas la de la fecha de las posibles elecciones. El banco estadounidense Morgan Stanley ha hecho sus propias apuestas, asegurando que sean cuando sean los comicios hay una cosa clara: ningún partido en solitario tendrá los votos suficientes para formar Gobierno. Y eso significa que habrá que pactar. De hecho, cree que hay muchas posibilidades de que se forme una alianza PP-PSOE contra Ciudadanos.

Se acabó la tregua que aparentemente se habían dado Ciudadanos y PP. La indisimulada disputa por el voto del electorado de derechas en la que están inmersos desde la caída de Mariano Rajoy y la llegada de Pablo Casado a la presidencia del partido conservador ha provocado el primer choque de trenes importante entre ambas formaciones políticas.

El procurador de Ciudadanos en las Cortes, Manuel Mitadiel, ve viable la reversión del Hospital Universitario de Burgos pero asegura que no será a cualquier precio. Para Mitadiel es necesario encontrar un acuerdo con Eficanza, la empresa adjudicataria de la construcción y explotación de la dotación sanitaria, pero entiende que "el problema es que no hay posibilidades de acuerdo de ningún tipo mientras el PP no se de cuenta de que metieron la pata hasta el fondo y fueron incapaces de definir el modelo".

Ciudadanos ha emplazado tanto al PSOE como al PP a que tengan "responsabilidad" y apoyen un gobierno de su partido, al que ve "legitimado" tras los resultados de las elecciones en Andalucía para presidir esta comunidad. "Habrá un nuevo gobierno que solo puede liderarse desde el centro, la moderación y la regeneración democrática. No lo van a liderar ni los de los EREs ni los de la Gürtel ni los partidos que se están descomponiendo", ha afirmado el secretario general del partido, José Manuel Villegas.

El Partido Nacionalista Vasco, tras negociar con el PP, ha decidido no apoyar las enmiendas aprobadas en el Senado por las formaciones de Casado y Rivera. Las enmiendas introducidas en la Cámara Alta planteaban un cambio en el sistema de elección de vocales del CGPJ, dejando en manos de los jueces la decisión sobre 12 de los 20 nombramientos. La negativa del PNV convierte en papel mojado las enmiendas que PP y Ciudadanos sí consiguieron aprobar en el Senado, en donde el reparto de escaños les resulta beneficioso para tomar decisiones sin necesi

PP y Ciudadanos han cerrado un acuerdo con 90 medidas “de desarrollo y prosperidad para un nuevo Gobierno en Andalucía”. Entre ellas, la defensa de las personas lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transgénico e intersexuales. Sí, transgénicos, como los alimentos modificados genéticamente. Una errata que ha acaparado gran parte del protagonismo. En concreto, se trata de la medida número 85.Ambos partidos seguramente se querían referir a las personas “transgénero”, aunque puede que las prisas les hayan jugado una mala pasada.

Ciudadanos cede a las exigencias de Vox que había pactado con el PP en Andalucía que el área de familia fuera una Consejería en exclusiva y no estuviera englobada en una macrocartera. Albert Rivera ha dicho que "el nombre me da igual, lo que importa es la cosa" pero no quiso decir que la iba a liderar el PP.

En el espectro del centroderecha la diferencia de criterio entre PP y Ciudadanos también es aún mayor. Mientras en el PP un 91% de sus votantes acepta el apoyo de Vox, en Ciudadanos la cifra es del 74%. En la encuesta de Metroscopia destaca también el bajo nivel que registra la opción de no sabe / no contesta. Así, solo el 2% de la ciudadanía no tiene una posición definida respecto a si los partidos deberían o no pactar con Vox.

Tras el acuerdo a tres bandas con PP y Vox al que han llegado este martes para permitir la entrada de la extrema derecha en la Vicepresidencia Tercera de la institución, Aguado ha explicado que "ningún voto de Ciudadanos ha ido a parar a Vox". A pesar de esa afirmación estos tres partidos han acordado un trueque de papeletas basado en lo siguiente: el PP ha votado a Vox en lugar de a su propia candidata para la Vicepresidencia Primera, Paloma Adrados, y esos votos de menos los ha compensado Ciudadanos.

Jorge Azcón, candidato del PP, será investido alcalde de Zaragoza este sábado tras alcanzar un acuerdo de Gobierno con Ciudadanos. Por su parte, la candidata de Ciudadanos, Sara Fernández, será vicealcaldesa de la localidad. Todavía quedan por definir el resto de áreas. Vox no entrará en el Gobierno de Zaragoza. A pesar de que el PSOE obtuvo un mayor número de concejales en el Ayuntamiento de Zaragoza (10), el bloque formado por PP (8), Ciudadanos (6) y Vox (2) ha sido el que ha firmado un acuerdo que permitirá que el candidato popular (...)

El misterioso voto en blanco en el Ayuntamiento de Huesca que dio la alcaldía al PSOE contra pronóstico sigue sin padre. Ninguno de los 25 concejales reconoce haberlo depositado. Pero el vídeo de la votación, en una urna transparente y en el que los votos de los concejales no fueron removidos, apunta a un concejal de Ciudadanos, Enrique Novella, que lo niega y pide que se respete el secreto del voto. El PP, que no alcanzó la alcaldía por ese voto en blanco, está que trina y acusa a Ciudadanos de acoger a un tránsfuga.

Mientras el clima de adelanto electoral crece en Cataluña —a la espera de que Carles Puigdemont traslade el momento idóneo para convocar—, el debate en torno a los partidos de la oposición y la construcción de una alternativa al independentismo está ya encima de la mesa. Ciudadanos, primera fuerza tras las elecciones catalanas de 2017, no descarta apostar por una lista constitucionalista conjunta, en la que podría integrarse el PP.

Vox y Ciudadanos presentan sus candidaturas, que se quedarán a cero en esta comunidad, donde su implantación es insignificante. Tendrán cero diputados, pero no cero votos. Cada uno de esos partidos podría conseguir entre un 1 y un 2 por ciento de los votos, muy lejos del umbral mínimo del 5 por ciento que se exige en cada circunscripción para lograr diputado. Entre los dos podrían sumar más del 3 por ciento de las papeletas, suficientes para evitar que el PP consiga dos escaños más.

La descapitalización de Ciudadanos (Cs) avanza a pasos de gigante a medida que se aproximan las próximas citas electorales. Más de doscientos cargos naranjas han abandonado ya en toda España las siglas que fundó Albert Rivera para pasarse al PP, según fuentes solventes de la dirección popular. El proceso de absorción desde las bases lo están intentando llevar, de momento, con discreción en la dirección del PP, y tampoco quieren hacer oficialmente público el desglose territorial de «fichajes».

Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes optan por el acercamiento al partido de Rivera y desoyen la orden de dar cañaGénova insiste en que son "de centroizquierda" mientras que Aguirre dice que deberían estar en el PP"El PP ha puesto a dos candidatas que reconocen que podrían votar a Ciudadanos", afirman en este partido

Últimamente he visto diversos montajes fotográficos en las redes sociales que coinciden en señalar al emergente y mediático partido político Ciudadanos (antes conocido como Ciutadans) como una simple máscara del PP. Sin embargo, estas lecturas yerran un poco el tiro. Creo que en realidad no se trata de una simple operación cosmética o de despiste para que incautos les voten sin saber lo que están votando. Creo que Ciudadanos no es la máscara del PP o un mero complemento para permitirle seguir gobernando sino algo peor: su recambio.

Ciudadanos continua su ascenso en intención de voto y alcanza ya al PP. El partido de Albert Rivera consigue un empate técnico con el de Mariano Rajoy en las preferencias de los españoles, según el ObSERvatorio del mes de marzo realizado por la empresa My Word para la Cadena SER. El PP volvería a ganar las elecciones generales si se celebrasen hoy con un 24,7% de los votos. A menos de un punto le seguiría Ciudadanos que obtendría un 23,8%.

Ciudadanos no quiere darle al PP una segunda oportunidad para pactar una comisión de investigación a gusto de las direcciones nacionales de ambas formaciones. Albert Rivera rechaza replantearse la posición de pedir la dimisión de la presidenta madrileña y su dirección no aceptará las llamadas al acuerdo que este lunes les han llegado desde el entorno de Rajoy.