La accesibilidad a establecimientos de comida rápida, la proximidad a espacios verdes o incluso la cercanía a una frutería son factores que, aunque no lo sepas, también determinan tu salud cardiovascular. Nuestro entorno urbanístico nos influye a la hora de llevar una vida más o menos saludable, y en ese campo se ha profundizado, durante los últimos cinco años, a través del proyecto Heart Healthy Hoods.