Un golpe. Un insulto. Una amenaza. Una paliza que desencadena la denuncia. "Señora, cíñase usted al hecho". En la mayoría de ocasiones hay una historia de control y dominación, de violencia económica, también frecuentemente sexual, de años de descrédito o empujones. Aún así, la foto de la violencia machista es una imagen incompleta: tanto social como judicialmente la mayor parte del maltrato sigue concibiéndose como si se tratara de un episodio puntual dejando de lado que, en realidad, la violencia de género suele ser mantenida en el tiempo.