María Salmerón, la mujer sevillana a quien una juez ha ordenado que entre en prisión por no acudir varias veces entre 2012 y 2014 a un punto de encuentro familiar a entregar a su hija a su exmarido, condenado por maltratarla, ha anunciado este lunes que piensa llegar "al Constitucional, a Estrasburgo y a la ONU". Su hija, que entonces tenía trece años, "decía que no quería ir con su padre". "No podía cogerla por los pelos y arrastrarla al punto de encuentro". Salmerón ha recordado que una juez de Dos Hermanas eximió a la niña de ese trámite.