Tras 50 años de incertidumbre, pruebas, aciertos y errores, la agricultura de invernadero en Almería no solo ha logrado la sostenibilidad del sistema sino que ha conseguido crear un modelo identificable de éxito que se estudia y se copia en otros lugares del planeta. Cada agricultor, técnico, comercializador ha aportado algo al modelo y entre todos lo van mejorando campaña tras campaña.