Afirmó que no se considera "ni machista, ni feminista" y explicó que sus reticencias hacia el concepto se deben a que existe en la actualidad un feminismo que "enfrenta" y que es muy radical. Aseguró que la mujer se está poniendo "todo el rato como víctima", cuando las españolas "son afortunadas sólo por haber nacido en este lado del mundo". Sobre los movimientos feministas, en tanto, sostuvo que no deberían dársele "tanta importancia" y que la lucha por la igualdad "devora la energía" e "impide seguir" a las mujeres para "avanzar".