Las empresas han visto crecer sus negocios gracias a la cascada de adjudicaciones por parte de las administraciones, que han abierto casi cualquier campo a las contratas. ACS, FCC, Ferrovial, OHL o Sacyr están en la gestión cotidiana de la atención sanitaria, social, educativa, de limpieza urbana, de aguas o del transporte público. Comunidades y municipios multiplican la externalización de sus competencias, que terminan en manos de unos pocos grandes grupos.