Aunque se venden como pastelería artesanal, es una multinacional catalana la que fabrica desde hace 25 años los famosos cruasanes de mantequilla. Los manolitos llegan ultracongelados a Madrid y resto de tiendas en España, donde se les da el acabado y se hornean. El fabricante es Europastry, un gigante empresarial que también distribuye a Granier o Starbucks, entre otros.