Hoy vivimos un momento en el que puede que recuperemos algo de la ilusión perdida. Ante el descrédito de la políti, por todo el estado han surgido candidaturas ciudadanas que pretenden devolver la esperanza de poder hacer de nuestras ciudades un lugar mejor. Transformar nuestras realidades de acuerdo a nuestras necesidades. En el caso de Madrid, esta plataforma se llama Ahora Madrid y desde el jueves hasta el domingo estará decidiendo su programa con todas las propuestas en las que la ciudadanía ha estado trabajando, así cómo la lista ele

Los principales ejes de su programa pasan por frenar los desahucios, parar las privatizaciones de los servicios públicos, paliar la pobreza energética, garantizar las prestaciones sanitarias municipales y desarrollar un plan urgente contra el paro juvenil, así como revisar todos los controvertidos contratos integrales que ha puesto en marcha Ana Botella para prestar el servicio de la recogida de basuras o la limpieza vial, abriendo la puerta a municipalizar los que sean necesarios para mejorarlos y abaratarlos, por ejemplo el de jardinería.

Nacho Murgui da el salto a la política institucional tras décadas en el asociacionismo madrileño y sufre la campaña de desprestigio que el PP ha iniciado con los integrantes de Ahora Madrid.

El que fuera número dos de la lista electoral de Manuela Carmena dirigió durante años la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM). Pues bien, el proyecto de presupuestos presentado por el concejal de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, incluye numerosas partidas presupuestarias consignadas a esta entidad. De entrada, la partida 001/037/232.00/489.01 indica que la FRAVM recibirá 508.080 euros de los contribuyentes madrileños con el objeto de "desarrollar servicios de dinamización vecinal".

El concejal popular explica lo ocurrido en la comisión del ayuntamiento y todos los antecedentes del caso.

La buena nueva de la resurrección de Cristo empezaba así su viaje a través de la historia, como una ola larga, tranquila y majestuosa, que nadie ni nada iba a poder detener

Jesús Murgui, obispo de Orihuela-Alicante, se vacunaba de forma irregular el pasado 8 de enero en la Casa Sacerdotal de Alicante con la primera dosis de Pzifer contra la COVID-19, pese a no corresponderle en ese momento por edad y situación. Este viernes se ha conocido que la hermana y el cuñado de Murgui recibieron esa primera inyección ese mismo día en el mismo lugar. Ambos viven con el.