No hay que lamentar heridos, solo "una veintena de tíos mojados", explica un testigo. Ayer venció el pantalán del puerto de Laredo con un grupo de voluntarios de la Cruz Roja encima, a la espera de embarcar. No hubo que lamentar heridos, solo "20 tíos mojados", explica uno de los testigos. El incidente ocurrió pasadas las 13.00 horas y salvo por el susto y un puente roto, todo quedó en una anécdota.

Los hombres que venían presuntamente abusando de la joven desde hace tres años, son el abuelo, el papá y dos tíos. Las alarmas se prendieron cuando, según informó la policía, la madre de la niña se percató de que su hija tenía señales de querer atentar contra su propia vida. En ese momento, la menor decidió contar lo que venía sucediendo para que la comisaría de familia se pusiera en contacto con la policía; esta, a su vez, comenzó la investigación que logró la captura de los cuatro sujetos.