En su taller de Ramala, Imad Mohammed fabrica zapatos con una particularidad. Están estampados con los nombres de Macron y Trump en árabe. Los clientes estadounidenses, británicos y franceses son recibidos con carteles que les exigen disculparse por las declaraciones racistas e insultantes de Macron hacia el islam y la decisión de Trump que causó el sufrimiento de los palestinos."Un zapato toca el suelo, el polvo y la suciedad. Si escribimos el nombre de alguien y este también se mancha, esto muestra cuánto valoras a la persona",cuenta Mohammed