Los vecinos del número 52 de la calle Galiano volverán a dormir tranquilos esta noche: una semana después de la desaparición de una boa constrictor albina de dos metros en el segundo piso y después de que su propietario se ausentase durante días han podido encontrar al animal donde sospechaban que estaba, en el interior del domicilio. “Al final, como había dicho estos siete días, estaba en casa: la encontramos en unas cajas de la mudanza en un cuartito al lado de su terrario, de su casa”, ha explicado a Enfoques el propietario del reptil.