En apenas 40 minutos de reunión, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, dejó muy claro al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que no podrá contar con los socialistas para continuar en La Moncloa. Pero, a la vez, Sánchez abrió la posibilidad de que si el Partido Popular no lo consigue, sea él quien intente llegar a La Moncloa. En más de una ocasión indicó que el PSOE ha entendido que el mensaje de las urnas es de cambio, "y vamos a explorar todas las posibilidades para que haya un Gobierno progresista".