E. bugandensis coexistió con otros microorganismos
De acuerdo con un comunicado de la NASA, estas cepas no solo se mantuvieron viables, sino que mostraron una proliferación significativa. Más preocupante aún es que la E. bugandensis coexistió con otros microorganismos, en algunos casos favoreciendo la supervivencia mutua, lo que podría complicar la inmunidad y salud de los astronautas.