Geometría y angustia. Con estas dos palabras Federico García Lorca definió los dos elementos que embargan al turista en su primera visita a la ciudad de Nueva York. Y es que el mapa de Manhattan es la cuadrícula más famosa del mundo, con sus once avenidas –que recorren la isla de norte a sur- cortadas en ángulo recto por 155 calles.
En contra de lo que se pudiera pensar a priori, su plan urbanístico ha cumplido más de dos siglos, ya que tenemos que remontarnos hasta 1811 para conocer su concepción.