Se hace de manera controlada, dentro de la consulta del alergólogo. El paciente está monitorizado y permanece dos horas en observación para estudiar si se generan reacciones adversas. Si todo va bien, significa que la vacuna es eficaz. El responsable de la técnica, el médico Luis Arenas, explica que la vacuna contra la velutina no utiliza veneno de este insecto, sino de otra especie, que es prima hermana, la véspula.