Ladislao Biro creó el bolígrafo en 1938. Ocho décadas después, sus nietos y bisnietos siempre llevan uno en el bolsillo. "Hay cosas que no se pueden escribir en el PC ni en el móvil", plantean.
Me recuerdan al anuncio de dos argentinos tomándose una cerveza y uno de ellos dice:
-Ché, ¿sabés que la carlsberg la inventó un argentino?
-No jodás.
-Carlos Bergante, ¡carlsberg!.
Yo no me imagino hoy en día en la universidad todo el mundo tecleando a toda pastilla con el portátil. ¿Y si es una clase de algebra?, ¿qué hacen?, lo escriben todo con TeX.
Defensa de lo manual a través de lo digital.
No veo la noticia por ningún sitio.
-Ché, ¿sabés que la carlsberg la inventó un argentino?
-No jodás.
-Carlos Bergante, ¡carlsberg!.
No hay problema.