Hubo un tiempo en que llevar pluma estilográfica era lo más. De hecho, lo irrelevante era que sirviera para escribir. Del mismo modo que hoy en día ocurre con el iPhone, lo importante de estas nuevas estilográficas era su acabado, su precio, los materiales caros que componían su cuerpo, el marchamo de su marca, la obsolescencia programada que imponía la nueva versión.
|
etiquetas: historia
Tengo un ipod de hace años y funciona como el primer dia, tengo un telefono reciente android y cada dia es mas lento, por no hablar de que no tiene actualizaciones de os ni demas.