El hombre que cambió la fórmula constructiva de Nueva York y liberó el desarrollo de la gran urbe de los incendios se llamaba Rafael Guastavino, nació en la Plaza de la Reina de Valencia y hasta el día de ayer seguía siendo un gran desconocido para la sociedad valenciana. Su obra y sus obras están presentes en más de 1.000 edificaciones, sobre todo en Estados Unidos, aunque también en Barcelona e incluso Cuba. Algunas, tan fundamentales para la historia de Manhattan como Grand Central Terminal.
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No es baladí la mención a Calatrava. Qué diferencia de obras entre uno y otro.
Como nombrar a Bill Gates cada vez que sale una noticia de informática. Innecesario y cansino.
He visitado varias de sus construcciones sin saber que eran de un paisano.
Tanto bombo es contraproducente.
Otro chiste patrocinado por el corrector ortográfico