Te habrás dado cuenta de este simpático ritual que lleva a cabo el perro cuando acaba de hacer sus necesidades: rascar el suelo, ya sea sobre la tierra, sobre la hierba o sobre el asfalto, con sus patas traseras y delanteras. Este comportamiento puede ser rápido o se puede tomar su tiempo. Comúnmente, se tiene la creencia por parte del propietario que este comportamiento tiene que ver con el de los gatos, es decir, el de intentar tapar los excrementos una vez acaba, pero muy torpemente, ¿verdad? Nada más lejos de la realidad.