Los restos que los arqueólogos han desenterrado en el norte de España no son para los débiles de corazón: Los esqueletos de hombres, mujeres y niños fse congelaron con el tiempo en los lugares exactos donde murieron, sus miembros fueron dispersos. El milenario pueblo de La Hoya no tuvo un final pacífico. Los investigadores ya sabían que una brutal masacre acabó con sus últimos habitantes; los arqueólogos han estado excavando el pueblo desde 1973. (Trad. Comen.)
A veces la Historia compite con la fantasía, y tolera sucesos o existencias francamente improbables. Sucedió en la Hoya de Huesca, donde un minúsculo reino perduró durante, quizá, catorce años, entre 1097 y 1111. Se conoce como Reino de los Mallos, y lo gobernó una mujer llamada Berta. Sabemos muy poco sobre ella.
Este yacimiento, cerca de la ciudad granadina, se ha convertido en un referente para estudiar el Plioceno en Europa. Una de las novedades más interesantes de la excavación tiene que ver con el hallazgo de restos de dos especies distintas de Mastodontes.
Un estudio realizado por investigadores españoles y británicos sobre los restos humanos descubiertos de los habitantes de este yacimiento ibero situado en Álava arroja nueva luz sobre cómo murieron: brutalmente asesinados.
El cabezo de la Hoya, considerado uno de los yacimientos más importantes para el estudio de la cultura tartésica, en grave riesgo por un proyecto urbanístico