Unos científicos han descubierto una nueva forma de herencia biológica no genética, mostrando por primera vez que los hijos pueden parecerse a la anterior pareja sexual de una madre, al menos en el caso de los insectos investigados. A la luz del hallazgo hecho en el nuevo estudio, parece que una forma de telegonía, limitada seguramente a especies muy concretas, sí puede existir, después de todo. Angela Crean, Russell Bonduriansky y Anna Kopps, de la Universidad de Nueva Gales del Sur en Australia, manipularon el tamaño corporal...

Un estudio con moscas apoya esta antigua teoría, denominada telegonía, que hasta ahora no había podido demostrarse. Un grupo de científicos australianos liderados por Angela Crean cruzaron moscas inmaduras, como sugería Weismann, con machos grandes y pequeños. Cuando ya eran fértiles, cruzaron a las hembras de nuevo y lo que encontraron fue que “a pesar de que el segundo macho engendró la descendencia, el tamaño de la progenie lo determinaba el de la anterior pareja sexual de la madre”.