En los últimos años se han publicado en España numerosas guías de lenguaje no sexista. Han sido editadas por universidades, comunidades autónomas, sindicatos, ayuntamientos y otras instituciones. Las que identifico con siglas o abreviaturas en la relación que aparece al final constituyen tan solo una muestra de ese extenso catálogo. Antepondré un guion a la página citada: MUR-8, UPM-10, UGT-14, etc. La mayor parte de estas guías han sido escritas sin la participación de los lingüistas.
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etiquetas: sexismo , lenguaje , visibilidad , mujer
El lenguaje es un mero transporte de información. No acarrea ningún tipo de sexismo implícito en él.
Sirve para comunicar un mensaje de un punto a otro.
Es una combinación de letras-silabas-palabras que transmiten alguna cosa.
El sexo está en el cerebro de cada uno. No en el lenguaje.
Dejad las palabras en paz, ¡Qué pesados!
Eliminamos entonces los insultos no sea que se utilicen para menospreciar a alguna persona?
Pero el sexo no es condición absoluta del lenguaje. (no está implícito)
Se hace un uso sexista (casi político) del lenguaje y no es correcto.
Es como decir que el "Assembler" es demasiado femenino y el "C" demasiado masculino.
Por poner un ejemplo...
Edito para añadir, a la vista de ciertos votos negativos, que este artículo no está a favor de que se escriba l@s niñ@s o lxs niñxs, sino todo lo contrario.
Aunque viendo que viene firmado por Ignacio Bosque ya era fácil suponer por dónde iba a ir.
Si la lengua definiera lo que somos, todos seriamos culpables.
C/C #2 / #10
Puros. Sin connotaciones. Ajenos a la intertextualidad. Sin evocaciones.
Ah. Ya. Deberíamos haberlo sabido antes.
Los usos políticos de las palabras son continuos, de forma que se intenta cambiar significados, ensuciar unas palabras o ensalzar otras más allá de usos, costumbres y academias.
Palabras como democracia, terrorismo, socialismo, anarquismo o comunismo son ejemplos claros donde la maquinaria de los diferentes servicios de información, a través de agencias de comunicación de su órbita, modifica continuamente significados para que sea el uso el que se acerque a la denominación que desean.
Que el feminismo moderno entre de frente y abiertamente en esta guerra es un marcado rasgo de la valentía y el arrojo que actualmente caracteriza al movimiento.
La guerra de las palabras está ahí, participes en ella o no.