Todo ocurrió poco después de las ocho de la tarde. Allí, tal y como explica la Policía Local, una clienta de 30 años de edad pretendía entrar en el probador con un total de seis prendas. Pero una dependienta le indicó que, a raíz de la pandemia, solamente se puede acceder con cuatro piezas. Al parecer, la reacción de la mujer fue nefasta, llegando a lanzarle la ropa a la cara a la empleada. Otra clienta más mayor, de 55 años, que también estaba en la zona de probadores y que se quedó anonadada con semejante escena, le recriminó a esta persona que tratase así a la dependienta. Entonces, y…