El hashtag
#MeToo, que se ha popularizado como grito de guerra contra las agresiones y el acoso sexual, podría convertirse en el nuevo activo empresarial de moda. Varias compañías se han movilizado ya para rentabilizar el eslogan como marca comercial. Ejemplo de ello es la empresa americana de cosmética y belleza, Hard Candy, que solicitó el pasado mes de octubre una marca registrada para usar el eslogan como reclamo publicitario, suscitando muchas críticas en las redes sociales. También es el caso de Fuzzy Logic, que utiliza
#MeToo en pulser
Salu2
A mí me parece que algunos tipos de "feminismo" como el exceso con los micromachismos, parte del #meToo o extremistas como Irantzu Varela, al fin y al cabo lo que hacen es más daño que otra a cosa, generando aversión y rechazo a un movimiento totalmente legítimo y necesario.
#METOO