Alrededor de la venganza se aglutina mucho conocimiento popular, del tipo “la venganza es un plato que se sirve frío” u “ojo por ojo, diente por diente” hasta el “alégrame el día” de Harry el Sucio. Pero ¿qué nos dicen los estudios sobre la venganza al respecto? ¿Realmente resulta una tarea satisfactoria? ¿Alivia o resulta improductiva? ¿La venganza es dulce? Lo que indica la investigación al respecto, sin embargo, parece indicar que, si bien la venganza resulta dulce mientras se planea, su consecución no reporta beneficios destacables, lo que