Tremendo palazo el que le ha caído a Adrian Mutu, quien ha sido condenado a pagar una indemnización de 17 millones de euros al Chelsea, por rescisión unilateral de contrato. Nunca antes en la historia del fútbol se había producido una sentencia así, por semejante monto, contra un futbolista. Pero el Chelsea, y sus astutos abogados, han ido hasta las últimas consecuencias para llevarse el gato al agua. Y lo han conseguido después de casi un año de espera