El “calçadão” es una terraza inclinada de 200 metros cuadrados, hecha de hormigón sobre el suelo, que hace escurrir la lluvia hacia una cisterna con capacidad para 52.000 litros. La ASA defiende el acceso al agua como un derecho humano básico y, por ende, la diseminación de pequeñas infraestructuras para captación y almacenaje de lluvia para consumo humano y actividades productivas. Su área de actuación, el bioma semiárido del Nordeste brasileño, suma 970.000 kilómetros cuadrados,y cerca de 21 millones de habitantes.