Según la norma aprobada por el pleno de la Eurocámara los transportistas deberán ofrecer a los pasajeros la devolución de precio del billete o una forma alternativa de llegar a su destino en situaciones de 'overbooking', cancelación o un retraso de más de 120 minutos. También tendrán que proporcionar comida y bebida en caso de cancelación o de retraso de más de 90 minutos en el caso de un viaje de más de tres horas. En estos casos, tendrán que pagar, si es necesario, hasta dos noches de hotel para los pasajeros atrapados, por un máximo de 80€