Hace años que son conocidas las propiedades antisépticas del cobre. Sus partículas permiten, por ejemplo, purificar el agua y eliminar infecciones. Hasta ahora, sus aplicaciones sólo se conocían en el área de la salud, pero gracias a una novedosa tecnología, patentada en Israel, hoy sus beneficios pueden llevarse hacia otras áreas. Así, existen prendas de vestir que están incorporando micropartículas de cobre en sus fibras textiles, lo que permite eliminar en más de un 99 por ciento los gérmenes, hongos y bacterias presentes.