Aparcar en doble fila, dejar el coche encima de la acera o en medio de un jardín, nos va a costar una multa, pero además nos van a sacar los colores. Ese es el objetivo de una campaña que el Ayuntamiento, a través de la Policía Local, va a poner en marcha este mismo fin de semana. Se trata de colocar pegatinas fosforescentes, es decir, muy llamativas, en el cristal del coche infractor, de forma que el conductor se entere de que incumple las normas, y si no la quita, todo el mundo sabrá que el conductor es un infractor más.