"Cuando un edificio se construye sobre cimientos de lodo, o sobre un vertedero de basura o de intereses, está condenado a derrumbarse al más mínimo azote de viento. El “imperio” de la derecha española, el actual PP neoliberal, es un “edificio” construido sobre cimientos tan poco consistentes como para resquebrajarse cuando los apuntalamientos no sean lo suficientemente fuertes para frenar su desplome. Es un edificio que se empezó a cimentar, tal cual es ahora, allá por 1990, cuando Aznar fue nombrado presidente del PP..."