El intrusismo en la profesión es una lacra que nos afecta a todos los trabajadores que nos hemos preparado específicamente para algo durante mucho tiempo. Sin embargo, hay que admitir, que en el plano laboral, son los periodistas los que más crudo lo tienen. A día de hoy, parece que todo el mundo puede ser periodista, tiene algo que decir (mejor o peor dicho) y que, encima, quiere vivir de ello.